lunes, 22 de agosto de 2016

El descanso de los adolescentes



Con el objetivo de conocer los hábitos de descanso de los alumnos del turno mañana del Instituto Jesús obrero, durante los días 21 y 22 de junio, los estudiantes de cuarto año A, B y C, de la materia Salud y Adolescencia realizaron una encuesta a todo el alumnado cuarto, quinto y sexto año. En total fueron encuestados 201 alumnos. Posteriormente en la clase de informática, se procesaron y graficaron los resultados, para su análisis.

Los resultados obtenidos fueron los siguientes:

Pregunta 1 ¿Cuántas horas dormís a diario, durante los días de semana?
a.  menos de 4 hs
b . entre 4 y 5 hs
c.  entre 6 y7 hs
d.   entre 8 y 9 hs
e.    más de 9 hs
4
29
138
24
6
2%
14%
69%
12%
3%





Pregunta 2 ¿Cuántas horas dormís a diario, durante el fin de semana?
a.  menos de 4 hs
b . entre 4 y 5 hs
c.  entre 6 y 7 hs
d.   entre 8 y 9 hs
e.    más de 9 hs
5
11
24
92
69
2%
6%
12%
46%
34%



Pregunta 3 ¿Creés que dormís suficiente?
a.  SI
b. NO
57
144
28%
72%


Pregunta 4 ¿Cuál es el principal motivo por el que no dormís suficiente? (Marcá una sola opción, la que consideres como motivo principal)
a.  por mirar televisión hasta tarde

b.  por usar el celular hasta tarde

c. por actividades extra escolares

d.  por falta de organización

e.  otro motivo

Marcó más de una opción
13
56
16
24
14
21
9%
39%
11%
17%
10%
14%



Según los especialistas, un adolescente necesita dormir entre 8 y 9 horas por día. La encuesta muestra que, durante los días de semana, la mayoría de los alumnos (el 69%) duerme entre 6 y 7 horas, pero si sumamos los porcentajes correspondientes a  los  que duermen ente 4 y 5 horas y los que duermen menos de 4 horas, llegamos a un 85% del alumnado que descansa menos de lo necesario. La situación se revierte durante los fines de semana, en  los que se observa que el 80% de los encuestados duermen al menos 8 horas. Un 72% reconoce no dormir lo suficiente. Entre los 144 alumnos que reconocieron dormir menos de lo necesario se indagaron los posibles motivos, entre los que se destacaron el uso de celular hasta tarde y la falta de organización.
La falta de horas de sueño en los adolescentes repercute negativamente, entre los principales efectos podemos mencionar:
  •  Se reduce el rendimiento escolar. Al estar cansados, tienen más dificultad para concentrase, mayores problemas de memoria y, en general, dificultades de aprendizaje. 
  • Aumentan la depresión y la tristeza. El cansancio permanente ocasionado por dormir poco provoca en muchos casos un aumento de la tristeza y la irritabilidad y, en ocasiones, puede influir en la aparición de depresión. 
  • Dificulta la relación con la familia y los amigos. La sensación de tristeza, el humor cambiante y la irritabilidad hacen además que las relaciones con los demás se entorpezcan. 
  • Baja el rendimiento deportivo. Un cuerpo cansado no puede dar tanto de sí como uno descansado y eso se advierte claramente en la práctica deportiva
  • Aumenta el consumo de alimentos. Está demostrado que la sensación de sueño lleva a comer más con el riesgo de adquirir sobrepeso.


Entre los encuestados se observa que existe un desajuste entre las horas de sueño de los días hábiles con respecto a los fines de semana. Esta irregularidad del sueño, según los expertos, se asocia con peores notas y un menor rendimiento en las habilidades cognitivas verbales, espaciales, de razonamiento y numéricas.

El principal motivo por el que se duermen tarde es el uso del teléfono celular. La exposición a las pantallas de los dispositivos móviles antes de dormir podría ser negativo, ya que la luz que se emite a través de estas pantallas puede alterar el ciclo del sueño y vigilia, por lo que deberían evitarse por lo menos una hora antes de acostarse.
Los resultados de la encuesta demuestran claramente que la mayoría de los alumnos del turno mañana duermen menos de lo necesario. Para evitar las consecuencias arriba mencionadas, deberían ajustarse las horas de descanso. Algunas recomendaciones para dormir mejor son:

  • Seguir un horario regular de acostarse por la noche. El hecho de acostarse cada día a la misma hora indica al cuerpo que ha llegado el momento de irse a dormir. El hecho de levantarse cada día a la misma hora también ayudará a establecer un patrón regular de sueño, de modo que se recomienda adaptarte a ese horario incluso los fines de semana.
  • Hacer ejercicio físico con regularidad.  Muchos expertos en sueño consideran que hacer ejercicio al final de la tarde puede ayudar a conciliar el sueño.
  • Evitar los estimulantes. No tomar bebidas con cafeína, como las gaseosas  cola o el café, después de las 4 de la tarde.
  • Relajar la mente. Evitar ver películas o programas de televisión violentos, de terror o de acción justo antes de acostarse. Leer libros de suspenso o intriga o con guiones muy activos también puede dificultar la conciliación del sueño.
  • "Desconectar" reduciendo la intensidad de las luces. La luz indica al cerebro que es hora de estar despierto. Evitar la televisión, la computadora u otros aparatos electrónicos, así como el teléfono móvil durante por lo menos una hora antes de acostarte.
  • No hacer siestas demasiado largas. Dormir más de 30 minutos durante las horas de sol o hacer la siesta demasiado tarde puede impedir que  se concilie el sueño por la noche.
  • Evitar pasar noches sin dormir para estudiar.  No dormir la noche anterior al examen puede hacer que se rinda menos de lo que se habría rendido de haber estudiado menos y dormido más.
  • Crea un ambiente favorecedor del sueño. Los estudios indican que la gente duerme mejor en habitaciones oscuras y ligeramente frescas.
Algunos trabajos publicados por los alumnos que podemos destacar son:

Tomas G. - 4to A
Manuela O- 4to C
Jazmin I. - 4to. C

Fuente: